Las Obligaciones Ineludibles de un Líder de Inocuidad

Si ocupas el cargo de Jefe de Aseguramiento de la Calidad o Líder de Inocuidad, desempeñas un papel fundamental en la estructura de la empresa. Aunque tienes una gran carga de responsabilidades, existen ciertas tareas que son de vital importancia y que no debes pasar por alto. En este artículo titulado «Las Obligaciones Ineludibles de un Líder de Inocuidad», te detallaré cuáles son.

Los roles y responsabilidades del líder de inocuidad

De manera general, el rol de un Jefe de Aseguramiento de la Calidad implica ser el encargado de diseñar y poner en práctica un sistema de gestión de la inocuidad de los alimentos. A primera vista, esto podría parecer que no conlleva numerosas funciones o acciones; sin embargo, para lograr que esto se cumpla eficazmente, el Jefe de Aseguramiento de la Calidad debe asumir y desempeñar cuatro funciones esenciales en relación con la inocuidad, como se ilustra en la Figura 1 y se detalla en la entrada de nuestro blog.

Figura 1: Los 4 roles de una jefatura y el nivel de comportamiento según interacción de los roles esenciales.

Las Obligaciones Ineludibles de un Líder de Inocuidad

Aunque es importante que un Jefe de Aseguramiento de la Calidad cumpla con los cuatro roles esenciales para garantizar la inocuidad, existen varias actividades que son ineludibles en su función, ya que constituyen pilares fundamentales de su labor.

Disponer de una carta de navegación

Un líder de inocuidad debería contar con un plan de trabajo, en el cual se programen las actividades de inocuidad que se llevan a cabo de manera regular, como revisiones, verificaciones y reuniones, así como aquellas que requieren la colaboración de otras áreas. Este plan debe ser revisado periódicamente para asegurarse de que no se omitan las actividades programadas.

Manejo de los cambios

Los cambios en la empresa, como la introducción de nuevos equipos, productos, materias primas o modificaciones en los flujos de producción, pueden tener un impacto significativo en los riesgos de inocuidad. Es esencial revisar y, en su caso, ajustar los componentes del sistema relacionados con estos cambios. Por ejemplo:

• Actualizar el plan HACCP.
• Modificar el plan de mantenimiento.
• Revisar y adaptar el plan de formación.
• Ajustar los procedimientos de limpieza y otros procedimientos conexos.

La naturaleza de estas acciones dependerá del tipo de cambio que se haya implementado. Si no se gestionan adecuadamente, los riesgos de inocuidad pueden aumentar, lo que podría impactar en la conformidad del producto, afectando tanto el cumplimiento legal como la seguridad de los consumidores.

Es responsabilidad de un Líder de Inocuidad mantenerse al tanto de estos cambios y puede lograrlo a través de los siguientes mecanismos:

• Sostener reuniones con los jefes de las áreas pertinentes para estar informado sobre los cambios.
• Incluir la revisión de los cambios en la agenda de las reuniones del equipo HACCP/HARA.
• Participar en reuniones gerenciales donde se aborden los proyectos de la empresa.

Entrenamiento y comunicación

Un sistema de gestión de inocuidad que busca la estandarización implica la documentación de sus componentes y el diseño de controles. Para implementarlo eficazmente, es necesario proporcionar capacitación y establecer una comunicación regular. Solo a través de estos medios se puede aumentar la conciencia de los controles y las responsabilidades del personal en relación con la inocuidad.

El Líder de Inocuidad debe garantizar que el personal reciba capacitación continua sobre los principios de inocuidad y los procedimientos aplicables. Esto implica la coordinación con el departamento de Recursos Humanos, que se encarga de las actividades de formación.

Además, es esencial establecer una estructura de comunicación, la cual debe ser integral y bidireccional, tal como se ilustra en la figura 2. Esto significa que la comunicación debe fluir en todas direcciones, permitiendo que la información se comparta de manera efectiva y se promueva una comprensión más profunda de la inocuidad en toda la organización.

Figura 2: Comunicación 360º del Líder de Inocuidad

La comunicación con la alta dirección debe centrarse en aspectos como el estado de rendimiento del sistema, la identificación de problemas o incidentes, y la recepción de retroalimentación de la dirección.

En cuanto a la comunicación con los colegas, es fundamental transmitir las prioridades, los resultados de rendimiento, las desviaciones y las no conformidades a otras áreas o jefaturas.

El Líder de Inocuidad generalmente trabaja con un equipo, y debe mantener una comunicación fluida con ellos respecto a las prioridades de trabajo, los planes y las acciones a ejecutar en un futuro cercano, así como evaluar el desempeño del equipo.

Asegurar cumplimiento de la legislación en materia de inocuidad

Las regulaciones suelen evolucionar, por lo que un aspecto clave en la gestión del cambio implica mantenerse informado acerca de las modificaciones en las legislaciones aplicables.

Además de estar al tanto de estos cambios, el Líder de Inocuidad debe garantizar el cumplimiento de la legislación. Para lograrlo, es fundamental:

• Confirmar que se han identificado todos los requisitos legales aplicables.
• Asegurarse de que el personal esté al tanto de estos requisitos legales.
• Garantizar que los requisitos legales se integren adecuadamente en las actividades de los procesos para asegurar su cumplimiento.
• Verificar el cumplimiento a través de métodos como inspecciones, pruebas y análisis de laboratorio, entre otros.

Asegurar comprensión de riesgos y sus controles

La gestión de la inocuidad se fundamenta en la priorización y en la adopción de enfoques preventivos. La prevención se alcanza a través del manejo de los riesgos de inocuidad, por lo tanto, es de suma importancia que un Líder de Inocuidad se asegure de que:

• Se hayan realizado análisis de peligros y evaluación de riesgos, identificando aquellos que revisten significancia.
• Las acciones de control se encuentren debidamente definidas y se apliquen en los procesos.
• El personal esté informado acerca de los peligros, sea consciente de los controles y comprenda las consecuencias de no seguirlos.

Para que el Líder de Inocuidad pueda cumplir con estas responsabilidades, es esencial que él mismo posea un conocimiento profundo de los peligros, los riesgos y las medidas de control relacionadas.

Formación y educación constante

Un Líder de Inocuidad es una persona altamente competente en los campos de la inocuidad y la calidad de los productos, así como en la gestión de estos ámbitos. Para desempeñar eficazmente su función, el Líder de Inocuidad debe contar con un programa de desarrollo de competencias propio. Los ámbitos de desarrollo de competencias del Líder de Inocuidad abarcan:

• Conocimiento de peligros y riesgos.
• Comprensión de la legislación pertinente.
• Familiaridad con la tecnología de producción.
• Habilidades de liderazgo.
• Conocimiento de sistemas de gestión, como HACCP y normativas de gestión.
• Utilización de herramientas para la mejora continua.
• Seguimiento de las tendencias en la gestión.

Conclusión

Un Líder de Inocuidad ocupa un rol fundamental en la organización, siendo responsable de asegurar la inocuidad y calidad de los productos. En este artículo se detallan las tareas esenciales de un Líder de Inocuidad:

• Mantener una carta de navegación de actividades claves.
• Adaptarse a los cambios en la empresa y actualizar el sistema en consecuencia.
• Proporcionar capacitación y mantener una comunicación efectiva con el personal.
• Asegurar el cumplimiento de la legislación aplicable en materia de inocuidad.
• Evaluar riesgos y controles, promoviendo una cultura de prevención.
• Continuar con la formación y desarrollo de competencias en áreas clave.

El Líder de Inocuidad debe ser un experto en estos campos para garantizar la seguridad y calidad de los productos.

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